Cómo podría Google reducir la fragmentación en Android
La fragmentación sigue siendo uno de los males endémicos de Android. Al principio, el problema residía principalmente en las diferentes versiones del sistema operativo que existían. De este modo te podías comprar un teléfono con una versión de Android u otro con otra versión distinta. Pero a medida que ha pasado el tiempo, la madeja se ha liado aún más. Actualmente, los fabricantes sacan sus propias versiones de sistema operativo basadas en Android, con lo que pueden construir un ecosistema individual a su alrededor. Un ejemplo claro es el Kindle Fire, que basado en Android 2.3, ha creado su propio sistema operativo con, incluso, su propia tienda de aplicaciones.
Casos de este tipo se repiten en casi todos los fabricantes, que terminan implementado una interfaz de usuario propia por encima de Android. Es el caso de TouchWiz en Samsung ó la interfaz Sense de HTC. De este modo, la experiencia de usuario no es la misma en un teléfono u otro aunque la versión del sistema operativo sí lo sea. El resultado es que la mayoría de los usuarios ni siquiera saben que están comprando un teléfono Android. ¿Pregúntenle a un usuario de Iphone sí sabe o no que está utilizando un Iphone? Por lo tanto, al final, la marca Android se ve perjudicada por esta dichosa fragmentación.